Qué debes saber para recibir al nuevo miembro de tu familia como se merece ¡guau!
4 enero, 2022
4 enero, 2022
La responsabilidad que adquirimos al comenzar a compartir nuestra vida con una mascota, se ve recompensada con creces con cariño sin medida, juegos y adorables lametones, pero es necesario prepararse para su llegada y en Vitakraft te damos los mejores consejos para que vuestra vida juntos comience de la mejor manera.
No nos cansamos de repetir que la decisión de convivir con un perro debe estar meditada y contar con la conformidad de todos los miembros de la familia, pues el nuevo peludo pasará a ser uno más. Y cuando decimos conformidad, decimos que cada uno debe tener claro el papel que desempeñará en su cuidado y educación, pues es bastante habitual que todos nos apuntemos a los momentos de juego, pero el ser constantes con las rutinas algo más tediosas nos cueste un poco más.
Involucrar a los más peques de la casa en las tareas diarias relacionadas con nuestros mejores amigos (teniendo en cuenta siempre la edad de los niños para proponerles actividades acordes a la misma) tiene multitud de beneficios para ellos, pues aprenden a responsabilizarse, a ordenar el día y a adquirir nuevas habilidades; además de contribuir a rebajar el estrés o la posible ansiedad por separación de los padres cuando crecen.
Preparar el espacio será la tarea fundamental antes de su llegada: ¿dónde dormirá? ¿dónde ubicaremos comedero y bebedero? ¿dónde colgamos correa y bolsas?
Nuestra casa debe ser el lugar del mundo en el que nuestro perro/cachorro se sienta más seguro, por eso es importante que pueda tener uno o varios lugares en los que estar tranquilo, descansar (su propia cama, por ejemplo) y observar lo que pasa alrededor.
Si el nuevo miembro de la familia va a ser un cachorro, puede ser una buena idea tener listos empapadores para sus necesidades hasta que aprenda a esperarse a sus paseos (o estar dispuesto a salir muuuuchas veces al día). En cualquier caso, para conseguir que aprenda dónde y cuándo, hay que dirigirle siempre con firmeza y cariño a donde queramos que haga pis y olvidarnos de prácticas que le asusten o humillen cuando haya “escapes”. También puedes ayudarte de los productos atrayentes o repelentes de micciones disponibles en el mercado, no te preocupes si tarda un poco en aprender, es una de las tareas más complicadas ante la llegada de un cachorro y con paciencia todo se logra.
También es importante, si va a tener que pasar tiempo solo, que el espacio en el que espere nuestra vuelta a casa sea seguro en todos los sentidos pues querrá explorarlo de muchas maneras, así que anticípate a los posibles riesgos (qué puede morder, qué puede tirar, con qué puede chocarse) y adapta su entorno a los mismos.
Haber elegido veterinario para su primera revisión e incluso saber por qué lugares podéis salir a pasear fuera de casa son tareas previas a la llegada de tu nuevo amigo que está bien tener previstas.
La entrada en casa es emocionante, aunque las primeras semanas serán de adaptación para ambos, hoy por ti mañana por mí. Las recomendaciones no son un manual de instrucciones y será necesario un tiempo para que os conozcáis, os respetéis y finalmente… os queráis más de los que jamás pensaste que podías querer.
Es normal que, tras su llegada, todos queráis pasar buenos ratos con él, pero debéis intentar no sobreestimularlo ni agobiarlo y darle espacio para que vaya conociendo el que será su hogar por sí mismo.
Recuerda que la adquisición de rutinas comienza desde el momento en el que llega, así que intentad ser constantes para que entienda rápido los horarios de comidas, paseos y costumbres de la casa. Una buena idea es que asocies palabras a las acciones cotidianas, así al escuchar esa palabra lo asocia a lo que viene después.
Aunque llegue algo sucio, recuerda que no es recomendable bañarle nada más llegar, pues son demasiadas experiencias nuevas de golpe y lo ideal es que esté relajado y no alerta en el momento del baño. Durante los primeros días, las toallitas húmedas específicas pueden ser de gran ayuda.
No retraséis la primera visita al veterinario demasiado, una primera revisión o puesta al día de vacunas y desparasitaciones es fundamental para que vuestro peludo crezca saludable y feliz. O simplemente hacer una visita para conocerle, que no asocie el veterinario con experiencias desagradables.
En poco tiempo será uno más de la familia y, sin daros cuenta, os habréis mimetizado y compartiréis horarios, aficiones y hasta pondréis caras parecidas. Y es que los perros aprenden por imitación, así que no es raro que al cabo de los años parezcáis el uno una extensión del otro.
Para llegar a este punto es importante ir todos a una en la educación de vuestra mascota y no aplicar distintas reglas o dar ordenes contradictorias. Es decir, si decidís que vuestro pequeño no debe subir al sofá, no debe poder subir delante de nadie de la familia.
También es importante que estéis atentos a conductas fuera de lo normal que os preocupen y os informéis o consultéis con un especialista si es necesario para que no se perpetúen. En este punto es importante dejar a un lado los mitos y “consejos de parque” y buscar actuar a partir de información contrastada por profesionales, el veterinario puede ser un gran aliado.
Con tiempo, cariño y constancia conseguiréis una convivencia más que feliz en menos de lo que imagináis. ¡Mucho ánimo y enhorabuena, familia!
Una de las características más destacadas de estos pequeños roedores es su pelaje suave y esponjoso. Cuidarlo no es complicado en la mayoría de los casos, pero es fundamental prestar atención y poner de nuestra parte todo lo que podamos, tanto en su ambiente como en su alimentación, para que su pelaje se mantenga en óptimas condiciones.
El invierno se acerca y, como nosotros, nuestras mascotas también necesitan prepararse para enfrentar las bajas temperaturas. Asegurarnos de que nuestra mascota está cómoda y segura en los meses fríos es fundamental para su bienestar y salud ¡Aquí van algunos buenos consejos Vitakraft para preparar a tu compañera de vida para el frío!
Tener una mascota en casa es una experiencia maravillosa, pero también supone una responsabilidad. Nuestros amigos peludos nos brindan compañía, alegría y amor incondicional. Sin embargo, también es importante asegurarnos de que nuestro hogar sea seguro y cómodo para ellos.